Si pienso en la primera vez que me atreví a ir sola al supermercado con mi hija mayor y hacer la compra semanal, no recuerdo exactamente la edad que tendría, pero sería en torno a los 3 años. Para hacerlo, necesitaba que ya no fuese en carrito para poder ir y volver caminando, poder empujar el carrito del supermercado y el de la compra por la calle y un mínimo de obediencia a las normas para estos sitios: no tocarlo todo con la mano (y eso que aún no sabíamos ni lo que era el gel hidroalcohólico de la pandemia); no echar a correr por los pasillos; no escaparse por…
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Aprender a leer para niños TEA
No, no vengo a presumir de niño TEA que ya lee a los 5 años, porque no es el caso. Si aún estamos en una fase poco desarrollada de su comunicación verbal (ahora estaría más o menos en el nivel de lengua de un niño de 2,5-3 años de desarrollo normotípico), lo cierto es que en el campo de reconocimiento de números y letras no tiene esta carencia. De esto nos dimos cuenta porque tuvo una racha de algunos meses durante el año pasado (sobre los 4 años y medio) en la que en cada salida de casa iba diciendo el color de cada coche hasta llegar a nuestro destino. …
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Si te abrazo no tengas miedo. Un hijo TEA en la adolescencia
La infancia con un niño TEA es claramente diferente, pero como padres ¿tenemos todos la sensación de que las cosas serán más difíciles a medida que crezca y sus diferencias sean más evidentes? Este es el tema sobre el que nos invita a reflexionar el autor de Si te abrazo, no tengas miedo, un libro autobiográfico de Fulvio Ervas que narra en primera persona la aventura iniciada por el padre de un chico autista que decide dejarlo todo durante unos meses para atravesar EEUU de costa a costa, en moto, con su hijo TEA. Así afronta el desafío que supone estar lejos de casa, sin las rutinas y comodidades habituales…
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Revisión y renovación del grado de dependencia en niños
¡Feliz año nuevo! Empezamos 2022 en el blog con un tema importante ¡las ayudas económicas para familias con niños autistas! Lo último que os conté de nuestras peripecias de casi 3 años con la Ley de dependencia, fue que empezamos a cobrar, sin efectos retroactivos, justo 24 meses después de haber hecho la solicitud. Es más, tras cobrar ese primer pago ¡nos tocaba la revisión y renovación del grado de dependencia del niño! ¡Horror! Porque viendo los ritmos y la pésima gestión administrativa para este trámite, ya me veía perdiendo de nuevo la prestación, teniendo que pasar por un nuevo calvario de documentos y esperas para poder reactivarla. Pero no.…
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Inclusión escolar y autismo. El factor suerte
Antes de acabar el curso anterior, P3, 1º de infantil en otras comunidades, os conté en Instagram el caso de una amiga, madre de un niño TEA algo mayor que el mío, a cuyo marido la maestra le pidió que no llevara al niño al colegio el último día de clase, porque sus compañeros se merecían poder disfrutar de su fiesta. Si todos los padres de niños atípicos sospechamos (o estamos plenamente convencidos, en función de nuestros batacazos contra la administración) que inclusión escolar y autismo no van nunca de la mano, escenas como estas nos hacen darnos cuenta de que la suerte, y no el respaldo legal, se esconde…